El objetivo es pasar de ronda como en Francia y en Corea-Japón. Aunque tiene un equipo sólido para no conformarse con ello y lograr la mejor ubicación de toda su historia.
Paraguay parece un abonado a los Mundiales. Clasificó casi sin fisuras para las últimas cuatro ediciones del certamen. Pero en la Copa le faltó siempre brillo y en la última el recambio generacional no dio el salto y se quedó afuera en primera ronda.
Esta vez, al mando del argentino Gerardo Martino con varios compatriotas nacionalizados en sus filas como Jonathan Santana, Ortigoza y Lucas Barrios, la Albirroja le agregó algo una dosis de buen manejo y visión ofensiva a la clásica garra guaraní.
Lamentablemente, tras el brutal ataque sufrido en enero, el conjunto perdió a su máxima figura: Salvador Cabañas. Para reemplazarlo deberán esforzarse Roque Santa Cruz (que tiene la oportunidad de rendir todo lo que se esperó de él desde que debutó), Haedo Valdez, Oscar Cardozo y el mencionado Barrios. Arriba tiene poder de gol, en el medio tiene juego y atrás como no podía ser de otra manera para un seleccionado de ese país presenta un gran solidez. Atributos que hacen de los Tata´s Boys, un rival de sumo cuidado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario