miércoles, 12 de octubre de 2011

Nunca es triste la realidad, lo que no tiene es remedio

Argentina ya es sinónimo de derrotas increíbles. Ahora perdió contra el único equipo sudamericano, con el que nunca había perdido, Venezuela. Lo que demuestra que la clasificación no va a ser fácil.


Si alguien creía que las Eliminatorias iban a ser más fáciles porque no esta Brasil, la erró bastante. El equipo argentino ya no es lo que era, y los otros ocho rivales tampoco lo son. Todo se ha emparejado y ni el hecho de contar con el mejor jugador del Mundo, Lionel Messi, va a liberar a la Selección de sortear el tortuoso camino hacia Brasil 2014.
Argentina ya no es garantía de nada. Ni Messi puede solo ganar el partido. Tampoco lo puede hacer ni Higuain ni Di María. Los únicos dos, aparte de Lio claro, que son titulares en equipos de real importancia en Europa, y que merecen y deben ser otra vez convocados. Los demás. Ninguno puede pedir explicaciones, si le toca salir, o si ni siquiera son llamados por el DT.
El hecho de que Andújar haya sido la figura del equipo pone en manifiesto la patética y errática performance del equipo. El resto fue paupérrimo. Tanto la actuación individual de cada uno, como la amarrete estrategia del DT Sabella dejan puntos preocupantes para analizar. ¿Por qué jugar con cinco defensores? ¿Para que poner a Di María de volante central? ¿Qué merito hizo José Sosa para ser titular en la Selección? ¿O Demichelis para volver?
Burdisso no hizo un gran partido pero fue el menos malo de la defensa, con cruces salvadores y la cuota de temperamento, que justamente no es lo que sobra a este equipo. Demichelis volvió a jugar en un nivel pobrísimo. Lo mismo que Otamendi. Rojo volvió a demostrar que esta verde para la Selección. Zabaleta no brilla, pero pasa desapercibido, eso en una defensa con tantas grietas no es poca cosa ya que sus errores ni se notan, comparados con su compañero.
Es inaudito que con cinco defensores, la Selección haya sufrido en el fondo como sufrió. Di María estuvo mas contenido que otras veces y se lo desaprovecho. Sosa no incidió. Messi fue bien controlado e Higuain quedo lejos de sus compañeros. El ex capitán Mascherano volvió a jugar tan mal como en la Copa América. Le dicen Jefecito, es hora que se transforma en Jefe. O perecer en el intento. Porque ese es el gran déficit de esta camada no tiene líderes. Messi hace lo que puede, podrá ponerse el equipo al horno, pero no tiene caudillos que lo defiendan. Maradona tenía a Ruggeri, Brown, Giusti. Kempes a Passarella, gallego, etc.
Esa característica podía disimular la ausencia de centrales confiables, laterales que defiendan y ataquen, volantes mixtos. Argentina tiene al mejor del mundo, grandes jugadores que lo pueden rodear como Di María, Higuain, Agüero, o Pastore. Pero no tiene una base que lo sostenga. Y todo se derrumba como castillo de naipes ante la primera brisa.

VS CHILE: Andújar 4; Zabaleta 5, Burdisso 6, Otamendi 6, Rojo 5; José Sosa 4, Braña 6, Banega 6, Di María 8; Messi 8, Higuain 10
Vs VENEZUELA: Andujar 8; Zabaleta 5, Burdisso 5, Demichelis 3, Otamendi 4, Rojo 3; Sosa 4, Mascherano 4, Di María 5; Messi 5, Higuain 5