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Solo se salvan Messi, Gago, Romero y, en menor medida, Agüero e Higuain. Los demás pasaron de partidos buenos a muy malos como Burdisso o Di María. Además el pobre aporte de los símbolos como Tevez, Masche y el Pupi, y las pésimas actuaciones de Milito y Lavezzi.
Tras la eliminación de la Selección llega el momento del análisis de los jugadores. Los mismos que obligaron la renuncia del Coco Basile, o que dieron pena en las Eliminatorias con Maradona y en el mismo choque decisivo que nos hizo volver ante Alemania. Pocas veces, Argentina jugó tan mal, y por largo tiempo, como viene sucediendo hace mucho tiempo. Y si bien el problema es de raíz, leáse Grondona. Los futbolistas son en gran parte, responsables. Es verdad faltan elementos en algunos puestos claves y eso ya no pasa por la culpa del entrenador o de los players, sino de la escasez de jugadores, un déficit que hay que empezar a trabajar en inferiores.
Pero es otro tema, ahora hay que tomar decisiones, y separar la cizaña del trigo. Y saber que jugadores merecen otra oportunidad y quienes no. En el uno por uno de los jugadores, porque la verdad se ve en el verde césped, y allí solo se ve un equipo en el que las individualidades no rinden, como en sus clubes, pero que tampoco tiene carácter y la técnica que muchos creen que el futbolista argentino tiene en sus genes.
LOS APROBADOS
Lionel Messi, promedio de Siamo Fuori de 7 Es el mejor del mundo pero en la Selección lo demuestra con cuentagotas. No está bien acompañado, de eso no hay dudas. A veces parece que el habla español y los demás hablan en maya. Está más solo que Pinochet, el día del amigo. Sin dudas, que siente la camiseta como pocos. Tal vez, en demasía. Incluso tal vez por eso, haya algun atisbo psicológico que no le permite definir las jugadas que el mismo genera para sí mismo. Pero cuantos goles generó el para los demás, los últimos tres fueron casi más merito suyo que de los compañeros que definieron las jugadas.
Fernando Gago (6,50): Entró casi por la ventana debido a su nula participación en el Real Madrid. Ingresó contra Colombia, y no incidió pero contra Costa Rica fue el principal socio de Messi, y también repitió esa perfomance durante algunos pasajes contra Uruguay. Se ganó el respeto de muchos que desconfiaban y fue uno de los sobrevivientes de este naufragio.
Sergio Romero, (6,25), Flojo debut, pero evitó la derrota con Colombia. A veces le falta seguridad a la hora de retener la pelota. Pero da la sensación de que es uno de los pocos que se pudo salvar del incendio, y encima lo hizo en un puesto muy complicado.
Sergio Agüero (6): Goleador del equipo y, al menos, hasta las semifinales de la Copa. Aportó tres tantos y una esperanzadora sociedad, aunque de a ratos, con Messi. Aunque ante Uruguay pasó desapercibido completamente.
Gonzalo Higuaín (5,5): Convirtió ante Uruguay. Remató mal el penal pero igualmente entró. Desperdició muchas situaciones, aunque mostró una cierta dosis de movimientos interesantes.
APROBADOS CON RESERVAS
Pablo Zabaleta (5,33): No sobresalió nunca pero cumplió en un puesto en el que, sin Zanetti ya, no debería tener competencia. Merece la confianza para que abandone la timidez y se transforme en un lateral decidido en ataque, algo que solo hizo con cuentagotas.
Nicolás Burdissos (5, 25): Abusó de los foules, innecesarios y peligrosos cerca del área, algo que se convirtió en la principal vía de Uruguay para atacar. Sin mucho trabajo ante Bolivia y Costa Rica, había cumplido en esos cotejos y ante Colombia fue el menos malo. Tuvo carácter para patear el penal y convertirlo, algo que no es poca cosa. Tiene liderazgo. Debería tranquilizarse y no abusar de los foules innecesario. Pero mantiene el crédito.
Javier Pastore (5): Apenas jugó minutos importantes contra Uruguay, ya que en el rato ante los tecos no puede ser evaluado. Ante la Celeste mostró pincelazos pero se esperaba más de él. Tal vez llegue el momento de dar la confianza que necesita.
Angel Di María (5): Un gol ante Costa Rica, aunque sea el tercero de un 3-0, maquilla una pálida imagen en lo global. Por momentos anduvo bien, en otros tomó decisiones equivocadas. Mantiene su lugar porque es joven y juega en un equipo importante como el Real. Pero su actuación en la Copa América está en deuda.
Lucas Biglia (5): Solo jugó el suplementario ante Uruguay. Lo suyo no fue ni bueno ni malo. Anteriormente había jugado un rato en el duelo final de la primera ronda. Jugador del técnico, su destino en la Selección, parece ir ligado a lo que suceda con Batista.
Aplazos:
Javier Mascherano (4, 75): El capitán falló en los momentos claves. Una tonta expulsión fue el broche a una pálida imagen que contó solo con un partido contra Costa Rica aceptable. Después no cortó tantas pelotas –su ubicación en el Barcelona, como central, lo habrá dejado falto de ritmo para estar en el medio campo-. Lo cierto es que tuvo una pobre actuación, a tal punto que para algunos, ya dejó de ser intocable.
Javier Zanetti (4,5): Ya no es el de antes. Su revancha personal y merecida no pudo ser. Por edad, en agosto cumple 38 años, su ciclo en la Selección está cumplido.
Carlos Tevez (4,33): Lo que más aportó fue confusión. Incluso afuera con declaraciones inoportunass como la de “que no quería que lo evalúen ya que no juega en su puesto”. Nunca engranó con Messi, y esto ya parece adrede, pero de los dos lados. Contra la Celeste había mejorado su actuación, mostrándose más activo pero su penal errado termina condenándolo. El Apache debe volver a ser el que fue, ese incisivo delantero que brilló en Boca, en Brasil y en Europa. Su juego es ese, y no ese chamuyo del jugador del pueblo que solo va al choque.
Gabriel Milito (4): Lejos el peor de todos los futbolistas que jugaron los cuatro partidos. Estuvo fuera de ritmo durante todos los cotejos. Contra Colombia y Uruguay mostró su peor faceta. Lento, impreciso con los pases y propenso a las faltas.
Ever Banega (4): Antes de la Copa era el socio de Messi. Lo fue hasta el segundo tiempo ante Bolivia. Después cometió el autogol y desapareció tanto en lo que quedó en el duelo ante los de Altiplano como ante Colombia. Le faltó personalidad para sobreponerse a ese error garrafal.
Esteban Cambiasso (4): Otro que cumplió su ciclo en la Selección. Impreciso y, curiosamente, demasiado quieto. Si bien apenas en agosto cumple 31 años, su desempeño en la Selección, en los momentos calientes no fue el esperado. Habrá que buscar sangre joven en ese puesto y solo si no se encuentra recambio, volver a utilizarlo.
Marcos Rojo (4): Su desempeño en la Copa, más allá de su nulo aporte en la Copa, es un fiel reflejo de lo que es Batista y su continua confusión. Lo hizo jugar en amistosos como si fuera el 3 del futuro, basto un flojísimo desempeño en el debut para devolverlo al ostracismo.
Ezequiel Lavezzi (3,5): Muy pobre ante Bolivia y Colombia. Contra Costa Rica jugó poco y lo único que hizo fue un foul innecesario para sumar su segunda amonestación y perderse el clásico rioplatense.
No jugaron ni un minuto: Juan Pablo Carrizo, Mariano Andujar, Nicolás Pareja, Ezequiel Garay y Diego Milito. De estos, todos, salvo Milito por su continua pobre actuación con el Seleccionado y sus ya 32 años, merecen otra oportunidad.
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